En el ámbito de la nutrición vegetal es frecuente utilizar indistintamente los términos bioestimulantes especiales y bioestimulantes agrícolas. Algunos profesionales utilizan el primer término para hacer referencia a los productos bioestimulantes que se utilizan para mejorar las prestaciones del cultivo en determinadas fases o estados concretos de las plantas.
En este artículo no diferenciaremos, y englobaremos como bioestimulantes agrícolas a todos los productos que se pueden encuadrar dentro de este segmento de la nutrición vegetal.
Partiendo de la base de que uno de los objetivos del agricultor es obtener un mayor rendimiento de sus cosechas, aumentando su producción y obteniendo una óptima calidad en sus frutos, nos encontramos ante demandas de nuevas soluciones en armonía con el medioambiente y una agricultura más sostenible.
Para dar respuesta a estas necesidades, JISA ha venido desarrollado, durante años, una serie de productos que combinan sustancias bioestimulantes y nutrientes esenciales; con formulaciones específicas para cada fase y estado del cultivo.
Qué son y cómo se clasifican los bioestimulantes especiales.
Los bioestimulantes agrícolas actúan sobre los procesos bioquímicos naturales de las plantas, ayudando a impulsar el vigor, la calidad y la productividad de los cultivos y sus cosechas.
Si bien los bioestimulantes se han utilizado en agricultura desde hace siglos, no ha sido hasta finales del pasado, cuando se han tenido en cuenta a un nivel más científico. En aquel entonces, se intentó poner nombre y clasificar por su acción a las diferentes sustancias que formaban parte de dichos productos. Esto generó en mayor o menor medida cierta controversia y confusión en el mercado, con la aparición de términos como fitoestimuladores, OMDFs, estimuladores biogénicos, fitofortificantes, mejoradores del metabolismo, etc. siendo definidos definitivamente como bioestimulantes para las plantas, tal y como aparece reflejado en el Reglamento Europeo 2019/1009 sobre productos fertilizantes, y en concreto en la Categoría Funcional de Productos 6 (CFP 6).
Actualmente, dentro del catálogo de bioestimulantes agrícolas de JISA, dividimos nuestros productos en dos familias diferenciadas por su acción en la planta: Los Activadores metabólicos y los Inductores fisiológicos.
Si bien es cierto, que los microorganismos beneficiosos para las plantas están contemplados como bioestimulantes, en el catálogo JISA tienen un apartado propio por su singularidad.
Los activadores metabólicos y los inductores fisiológicos.
Volviendo a la clasificación de activadores metabólicos y de inductores fisiológicos como bioestimulantes agrícolas. Los primeros están formulados con componentes de gran calidad y de naturaleza diversa, como aminoácidos y otras sustancias orgánicas, están indicados para ser aplicados en cualquier fase del ciclo de cultivo, generando un efecto bioestimulante sobre la planta.
Estos activadores metabólicos aumentan la actividad biológica del suelo, mejoran la absorción, asimilación y eficacia de nutrientes y proporcionan un efecto osmoprotector que fortalece a la planta de las condiciones ambientales adversas, mejorando la tolerancia al estrés abiótico.
Respecto a la familia de inductores fisiológicos, son productos que tienen formulaciones específicas que combinan sustancias bioestimulantes, como pueden ser extractos de algas y nutrientes esenciales; en la cantidad y proporción adecuada para una determinada fase fenológica del cultivo.
Son productos con funciones específicas para mejorar los procesos fisiológicos de germinación de las semillas, enraizamiento, brotación y crecimiento vegetativo, floración, cuajado, desarrollo, engorde y maduración de los frutos, y su aplicación tiene lugar en momentos concretos del cultivo.
Así, los bioestimulantes especiales, agrícolas o para las plantas, como se desee denominarlos, son en la actualidad productos con una base científica muy importante detrás de su formulación, los avances en fisiología vegetal, bioquímica y biotecnología están cada vez más vinculados a la nutrición vegetal. Y por ello, cada vez es más importante conocer que me aporta cada producto y el modo de uso correcto en cuanto a momento de aplicación y frecuencia para garantizar su éxito. El equipo técnico de JISA está a su disposición para ofrecer el asesoramiento técnico necesario.
